Durante el fin de semana, hubo un intenso movimiento turístico en el paso fronterizo entre Bernardo de Irigoyen y la ciudad brasileña de Dionísio Cerqueira, uno de los pasos terrestres más utilizados por turistas argentinos y de otros países del Mercosur que eligen vacacionar en tierras y playas brasileñas. En consecuencia, con el cambio de quincena y el recambio turístico que se genera, empezaron a incrementarse las largas colas en el centro de frontera como así también en el puesto sanitario apostado al costado de la Aduana Argentina. En diálogo con la radio FM 89.3 Santa María de las Misiones, el presidente de la Cámara de Comercio de Irigoyen, Walter Feldman, notificó que, ?ayer hubo un tráfico impresionante. El sábado y domingo fue monstruoso. Se hablan de demoras de hasta 6-7 horas para egresar e ingresar al país.? Falta de personal en el sector de Migraciones El gran problema en la frontera es la falta de personal migratorio. Feldman apuntó que hay siete personas que deben realizar el flujo en la Aduana para miles de vehículos, pero que se turnan durante el día. ?El problema es que a la mañana hay dos, a la tarde dos y a la noche uno. Así se arman las largas filas?, explicó. El dirigente aseguró que, ?el movimiento suele demorar unas dos o tres horas, pero cuando hay cambios de quincena se arman filas muy grandes.?