La caída de la actividad económica sigue impactando negativamente en la recaudación de impuestos, según muestra el comportamiento de varios tributos ligados al mercado interno y al consumo. Según estimaciones privadas, el producido por el IVA y el Impuesto a las Ganancias cayó en términos reales en julio el 16,7% respecto de igual mes del 2023. El dato anticipa que la recaudación de julio, que el Gobierno estará dando a conocer este jueves, volverá a mostrar datos sumamente deprimidos. Según señala el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), se registró un mal desempeño de la recaudación del impuesto a las Ganancias, con una baja del 24% real interanual, y del IVA con el 11,7%. En conjunto, la recaudación de ambos tributos ?habría registrado una caída real interanual del 16,7%?, dice el centro de estudios que dirige el economista Nadin Argañaraz. El especialista precisa que ?en el acumulado de los primeros 7 meses del año, la variación interanual real habría sido negativa por 9,4% para los dos tributos". Por su lado, la consultora Politikon Chaco estimó una merma del Impuesto a las Ganancias del 24% y del Impuesto al Valor Agregado del 11,7%. También se observan descensos reales en los Impuestos Internos del 18,1% y en Otros Coparticipados del 13%. Además presentaron bajas los recursos del impuesto a los Bienes Personales del 90,4%; el Régimen de Energía Eléctrica, 15,3% y del Monotributo, con el 8,7%. En cambio, el Impuesto a los Combustibles Líquidos registró un incremento del 80% respecto del año pasado, por el incremento del tributo que hizo el Gobierno en los primeros meses del año, ya que el consumo de combustibles en Argentina está cayendo. Recaudación: prevés fuerte caída en julio: A partir de estos datos se puede inferir que la recaudación de julio de este año va a registrar nuevamente una fuerte caída. El mes pasado fue del 14% en términos reales. Además de este tipo de impuestos, los relacionados con el empleo, que son los aportes y contribuciones a la seguridad social están siendo afectados por el efecto de licuación de salario producto de la inflación, combinado con una caída del empleo registrado, que se estima en 200.000 puestos en los primeros seis meses. También las retenciones a las exportaciones están siendo afectadas por la caída de los precios internacionales. Esta semana, por caso, la soja tocó los u$s380 la tonelada, a lo que se suman caída en otras producciones de la oferta argentina. El efecto de suba del producido que hay este año se debe más que nada a cantidades, ya que el año pasado con la sequía se exportó la mitad de lo realizado este año. El Impuesto que se mantiene a la cabeza como salvador de la situación es el Impuesto PAÍS, que el gobierno promete bajar en septiembre al 7,5% desde el 17,5. Para ese momento ya estará en vigencia la restitución de Ganancias de la Cuarta Categoría, la moratoria y el blanqueo. La recaudación acumulada de ese tributo explica por si misma el superávit fiscal de este año