Tres bandidos rurales que volvían de robar y faenar un animal vacuno de una estancia cercana a la ciudad de Saladas fueron atrapados por personal de la Policía Rural y Ecológica. El PRIAR había a desplegado un operativo sorpresa sobre un camino cercano a la Primera Sección Lomas. La banda de cuatreros comenzó a ofrecer los cortes cárnicos que robaban a través de las redes sociales, ya que los controles que la Policía hace en carnicerías "les complicó ese mercado". El procedimiento se llevó a cabo en horas de la madrugada de ayer, sobre un camino vecinal que une la localidad de Saladas con la Primera Sección Lomas. Los efectivos del PRIAR, que vienen analizando los movimientos de los cuatreros de la zona, se apostaron en el lugar y un rato más tarde, demoraron un automóvil Renault Logan negro en el que se desplazaban David Z., Víctor B. y Luis S., de entre 25 y 45 años, respectivamente. Tras registrar el vehículo, los policías hallaron poco más de 200 kilogramos de carne de animal vacuno, recién faenada y de forma clandestina. Según pudo establecer la investigación, el animal pertenecía a una estancia denominada "Los Guazunchos", arrendada por la firma "Ibotí Agropecuaria" y la Policía pudo descubrir esto porque los bandidos olvidaron quitar la marca al pelaje del animal faenado que trasladaban. Pero los tres detenidos no serían los únicos que formarían parte de la banda de cuatreros, ya que los efectivos del PRIAR bajo el mando del comisario César Augusto Romero, jefe de aquella unidad especial, encontró minutos más tarde durante un rastrillaje y por caminos aledaños adonde se hizo el procedimiento, a un caballo de pelaje gris, utilizado por los cuatreros para sacar la carne del medio del campo. Muy cerca de ese lugar, también encontraron una motocicleta, lo que indicaría que otros sujetos lograron huir al ver la redada del PRIAR. Un dato llamativo, que desde hace un tiempo viene investigando la Policía y la Justicia, es que debido a las exhaustivas inspecciones en carnicerías de la ciudad realizadas por la fuerza del orden, los bandidos se vieron obligados a modernizarse y ahora ofrecen la carne robada a través de las redes sociales. Con esta información, ahora se investigará puntualmente a los potenciales compradores de la carne faenada clandestinamente. La causa recayó en manos de una fiscalía rural que ordenó que los tres demorados durante el procedimiento queden en calidad de detenidos a la espera de que un juez defina su situación procesal a futuro.